Tour de 9 Días desde Marrakech al Desierto, Fez y Chefchaouen

0
Reserva este tour

    Save To Wish List

    Adding item to wishlist requires an account

    75
    9 dias 8 noches
    Detalles del tour

    El Tour de 9 días desde Marrakech al Desierto, Fez y Chefchaouen es una de las rutas más completas de Marruecos.
    Une el exotismo del Sahara, la historia de las Ciudades Imperiales y la calma del norte.
    Desde los laberintos de Marrakech hasta las dunas doradas del Erg Chebbi, cada etapa sorprende.
    Cruza los bosques de cedros del Atlas y déjate cautivar por el azul místico de Chefchaouen.
    Este viaje combina cultura, naturaleza y emoción.
    Descubre el Marruecos de los zocos y los aromas, de los nómadas y los oasis, de los palacios antiguos y las montañas infinitas.
    Una aventura que invita a desconectar del mundo moderno y reconectarse con la esencia del viaje.

    Detalles del tour

    Desde Marrakech

    Hora de salida

    8:00 AM

    El precio incluye

    • Transporte en vehículo moderno con aire acondicionado
    • Conductor / guía de habla hispana
    • Alojamiento en riads y hoteles con cena y desayuno
    • Excursión en dromedario en el desierto
    • Noche en campamento bereber con cena y música
    • Visitas según itinerario

    Precio no incluye

    • Almuerzos y bebidas
    • Entradas a monumentos
    • Propinas y gastos personales
    Reflejos
    • Cruzar el Alto Atlas y la Kasbah de Ait Ben Haddou

    • Dormir bajo las estrellas en el desierto del Sahara

    • Visitar Fez, capital cultural de Marruecos

    • Pasear por la ciudad azul de Chefchaouen

    • Recorrer paisajes únicos: oasis, gargantas y montañas

    Itinerario

    Día 1: Llegada a Marrakech

    ChatGPT a dit :

    A tu llegada al aeropuerto de Marrakech-Menara, nuestro equipo te recibirá con la calidez marroquí.
    Durante el traslado al riad u hotel, empezarás a sentir la energía vibrante de la ciudad.
    Marrakech es un mundo de colores, sonidos y aromas.
    Los vendedores ambulantes, los carros de caballos y los llamados del muecín marcan el ritmo de una ciudad eterna.
    Por la tarde, si el tiempo lo permite, visita la Plaza Jemaa el-Fna, el corazón de Marrakech.
    Al anochecer, se transforma en un escenario vivo con narradores, músicos y cocineros al aire libre.
    Desde una terraza, contempla el atardecer sobre los minaretes y los tejados rojizos.
    Será tu primera postal de Marruecos.
    Cena libre y noche en Marrakech.

    Día 2: Marrakech – Ait Ben Haddou – Ouarzazate – Valle del Dades

    Tras un desayuno tradicional con pan fresco, miel y aceite de argán, partiremos hacia el sur cruzando las montañas del Alto Atlas por el serpenteante paso de Tizi n’Tichka, el más alto de Marruecos. El paisaje cambia a cada curva: valles profundos, aldeas bereberes de adobe y terrazas cultivadas se extienden hasta donde alcanza la vista.
    Nuestra primera gran parada será la legendaria Kasbah de Ait Ben Haddou, una fortaleza de tierra rojiza declarada Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO. Sus torres y murallas parecen emerger del desierto, y al caminar por sus calles estrechas se siente la historia de siglos pasados. Fue escenario de películas como Gladiator, La Momia o Juego de Tronos, y conserva la esencia del antiguo Marruecos sahariano.

    Después del almuerzo, continuaremos hacia Ouarzazate, conocida como “la puerta del desierto”, donde podrás admirar la Kasbah Taourirt, antigua residencia del pachá de la región. A medida que nos acercamos al Valle del Dades, el paisaje se vuelve cada vez más espectacular: montañas de tonos rojizos, gargantas profundas y pequeños oasis rodeados de palmeras.
    Llegada al valle al atardecer, con la luz dorada bañando las colinas de roca. Cena y noche en un riad tradicional rodeado de naturaleza.

    Día 3: Valle del Dades – Gargantas del Todra – Desierto de Merzouga

    La mañana comienza con aire fresco y el canto de los pájaros en el valle.
    Después del desayuno, salimos hacia las Gargantas del Todra, un impresionante cañón natural.
    Sus muros de piedra se alzan más de 300 metros, creando un paisaje majestuoso.
    Pasear por el desfiladero es una experiencia única, donde la naturaleza impone su grandeza.

    Continuamos hacia Erfoud y Rissani, atravesando paisajes áridos y palmerales infinitos.
    El aire se vuelve más cálido y el horizonte se tiñe de arena: entramos en el desierto del Erg Chebbi.
    En Merzouga, los dromedarios te esperan para iniciar la travesía por las dunas.
    Solo se escucha el viento y el suave paso sobre la arena.

    El atardecer pinta el cielo de naranjas y rosados, un espectáculo inolvidable.
    Al llegar al campamento bereber, te espera una cena tradicional bajo las estrellas.
    La música de tambores, el fuego y la inmensidad del desierto crean una atmósfera mágica.
    Noche en jaima privada con todas las comodidades.

    Día 4: Merzouga – Pueblos nómadas – Khamlia – Erg Chebbi

    El amanecer en el desierto es un espectáculo que no se olvida. Las dunas cambian de color con los primeros rayos del sol, creando un paisaje casi irreal. Después del desayuno, dedicarás el día a explorar el entorno del Erg Chebbi, un desierto vivo lleno de cultura y tradición.

    Visitaremos el pueblo de Khamlia, conocido por su comunidad gnawa, descendientes de antiguos esclavos del África subsahariana. Su música espiritual, acompañada por tambores y castañuelas metálicas, transmite la historia de sus ancestros.
    Luego recorreremos las pistas desérticas en un vehículo 4×4, visitando antiguas minas, aldeas bereberes y familias nómadas que todavía viven en haimas. Conocerás su modo de vida sencillo y hospitalario, compartiendo un té con ellos en medio de la nada.

    Por la tarde, podrás disfrutar de un paseo en quad o simplemente relajarte observando la puesta de sol desde lo alto de una duna. La noche llega lentamente y el silencio del Sahara envuelve el campamento. Cena y segunda noche en el desierto, bajo un cielo estrellado imposible de olvidar.

    Día 5: Merzouga – Valle del Ziz – Bosques de Cedros – Fez

    Despertarás temprano para disfrutar de la salida del sol antes de dejar el desierto atrás. Tras desayunar, iniciaremos el camino hacia el norte atravesando el Valle del Ziz, donde un extenso palmeral verde contrasta con las montañas áridas del Atlas. Este valle, surcado por ríos y kasbahs, es uno de los paisajes más bellos de Marruecos.

    A medida que ascendemos hacia el Medio Atlas, el clima cambia: el aire se vuelve más fresco y aparecen los bosques de cedros. En Azrou, tendrás la oportunidad de ver a los simpáticos monos de Berbería que habitan en libertad. Luego, haremos una parada en Ifrane, una ciudad sorprendentemente europea conocida como “la Suiza marroquí”, por su limpieza, su arquitectura de tejados inclinados y su ambiente tranquilo.

    Por la tarde llegaremos a Fez, la capital cultural y espiritual del país. Las callejuelas antiguas y los minaretes que se asoman entre las casas anuncian que has llegado a una ciudad con alma.
    Cena y noche en un riad tradicional en el corazón de Fez.

    Día 6: Descubriendo Fez – La joya espiritual

    Fez es una ciudad que transporta al pasado. Fundada en el siglo IX, conserva una de las medinas más antiguas y mejor preservadas del mundo islámico. Acompañado por un guía local, te adentrarás en este laberinto de callejones donde la vida cotidiana parece seguir el ritmo de hace siglos.

    Visitarás la Madrasa Bou Inania, una obra maestra de la arquitectura meriní, la Universidad Al Karaouiyine, reconocida como la más antigua del mundo, y los Curtidores de Chouara, donde los artesanos tiñen el cuero con técnicas tradicionales. Los colores, los olores y los sonidos crean una experiencia sensorial única.
    También conocerás el Palacio Real, con sus impresionantes puertas doradas, y el barrio judío (Mellah), testigo del pasado multicultural de Fez.

    Al final del día, podrás disfrutar de una vista panorámica desde una colina que domina toda la ciudad amurallada: un mar de tejados de barro y minaretes que se tiñen de dorado al atardecer.
    Cena y noche en Fez.

    Día 7: Fez – Volubilis – Meknes – Chefchaouen

    Después del desayuno, la ruta continúa hacia el norte, rumbo a las ruinas romanas de Volubilis, un impresionante sitio arqueológico que revela el pasado romano de Marruecos. Caminarás entre columnas, mosaicos y templos bien conservados que narran la historia de una antigua ciudad floreciente.

    A pocos kilómetros se encuentra Meknes, otra de las grandes Ciudades Imperiales. Fundada por el sultán Moulay Ismail, fue conocida como “la Versalles de Marruecos” por su grandiosidad. Podrás admirar la monumental Puerta Bab Mansour, el Mausoleo de Moulay Ismail y los antiguos graneros reales, ejemplos del esplendor de su época.

    Por la tarde, el camino te llevará hacia el norte, atravesando paisajes montañosos hasta llegar a la ciudad azul de Chefchaouen. En cuanto entres en sus calles, sentirás una paz especial: cada muro, cada escalera, cada puerta está pintada en tonos de azul que parecen flotar entre las montañas del Rif.
    Cena y alojamiento en un riad con vistas al casco antiguo.

    Día 8: Chefchaouen – La perla azul

    El día está dedicado a descubrir la serenidad de Chefchaouen, una de las ciudades más bellas y fotogénicas del mundo. Sus callejones empinados y sus casas azul celeste crean un ambiente mágico y relajante. Pasear por esta ciudad es dejarse llevar: no hay prisa, solo el placer de observar y respirar la calma.

    Podrás visitar la Kasbah, la Plaza Uta el-Hammam, los zocos artesanales y los miradores desde donde se obtiene una vista completa del pueblo y las montañas. Chefchaouen es el lugar perfecto para comprar recuerdos auténticos: mantas tejidas, cerámica colorida o aceite de argán puro.
    Por la tarde, podrás disfrutar de un té a la menta en una terraza mientras el sol cae lentamente sobre las montañas del Rif.
    Cena y segunda noche en Chefchaouen.

    Día 9: Chefchaouen – Rabat – Marrakech

    Tras el desayuno, emprenderemos el viaje de regreso hacia Marrakech. La carretera desciende por los valles del Rif ofreciendo paisajes tranquilos y llenos de vida rural. Durante el trayecto, realizaremos paradas para descansar y disfrutar del entorno, pasando por Rabat o Casablanca, donde tendrás una breve visita panorámica si el tiempo lo permite.
    Finalmente llegaremos a Marrakech, donde serás trasladado a tu alojamiento o al aeropuerto, según la hora del vuelo.

    Así concluye esta inolvidable travesía de nueve días por Marruecos, un viaje que te habrá llevado desde el desierto más profundo hasta las montañas y el mar, revelando la riqueza cultural y la belleza infinita de este país fascinante.

    Mapa

    Fotos